El que se cansa primero

Rudolph Giuliani es un político y abogado que se convirtió en alcalde de Nueva York de 1994 a 2001. Anteriormente fue el fiscal que procesó con éxito a los jefes de la mafia. Siendo alcalde de Nueva York la transformó de una ciudad caótica en una urbe con orden, logrando además disminuir las tasas de crimen abruptamente. Tuyo éxito donde otros habían fracasado Se apoyó en varias teorías psicológicas y del comportamiento para generar un cambio. En este artículo hablaremos solo de una de esas aristas y una de esas teorías. Si un policía se encontrada un carterista en Broadway, estos lo llevaban a la estación de policía se lo procesaba y al día siguiente estaba libre. La policía creía que su trabajo era inútil. En algún momento dejaron de “tomarse la molestia” de aprehender a los carteristas por que al día siguiente o el mismo día iban a salir libres. Giuliani instruyó a sus agentes policiales, para que lo hagan una y otra y otra vez. Si en una semana había que aprenderlo los 7 días, los 7 días se lo llevaba a la estación y se lo procesaba. Los que se debían de cansar de la actividad criminal y de que los apresen una y otra vez debían ser los carteristas, no los policías. Surge aquí la frase “el que se cansa primero”; no debe cansarse primero el policía, que es lo normal. Debe cansarse primero el delincuente. Al final los delincuentes se sintieron acosados y no podían ejercer su actividad, pasaban contantemente entrando en las estaciones de policía. ¿Dejaron de delinquir? En la ciudad de Nueva York si, lastimosamente pasaron a ciudades vecinas donde la policía les dejaba ejercer su labor criminar con más facilidad. ¿Hemos aprendido esta lección en América Latina? José Luis Badillo Especialista en Seguridad Física